De acuerdo al Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) de México las exhalaciones del volcán Popocatépetl sumaron 83 durante las últimas horas. Las autoridades locales han asegurado que estarían listas para enfrentar una emergencia. Ernesto Nemer Álvarez, secretario general de Gobierno del Estado de México, indicó que se mantienen en nivel de alerta «amarillo 3» (un estado previo a la alerta roja 1), pero afirmó que de cambiar la actual fase 3 evacuarán a las 65 mil personas que habitan en zonas cercanas al volcán. No se tiene prevista una evacuación inmediata, pero agentes de Protección Civil han asegurado que ya cuentan con 133 albergues habilitados con materiales, despensas y agua, la meta será contar con 266 albergues para proteger a 85 mil personas en caso de desastre.
Se ha reportado que el Popocatépetl ha lanzado fragmentos a una distancia de 500 metros, sobre todo hacia el lado este del cráter. El volcán está rodeado por el Estado de México, Puebla, Tlaxcala y Morelos.
El Cenapred ha decidido mantener un pronóstico «reservado» respecto a una posible erupción, ya que los especialistas de esa entidad han declarado a los medios que no se puede predecir cómo será la actividad del volcán en las próximas semanas. Se cree que podría haber cierta actividad explosiva a escala intermedia. Expertos indican que el domo que el volcán tiene en su cráter será destruído, pero no se puede calcular con certeza cuándo ocurrirá. Los especialistas aseguran que la reciente actividad sísmica indica que hay una fractura dentro del volcán, pero no es posible saber cuándo habrá una erupción o si la situación actual se podría extender por muchos meses más. De acuerdo a los expertos de Cenapred habría riesgo de que el volcán lance un flujo de lodo de hasta 40 millones de metros cúbicos, afectando a 99 poblados.
La ceniza emitida por el volcán ha llegado hasta algunas delegaciones del Distrito Federal, como respuesta a este evento las autoridades decidieron repartir más de 480 mil máscaras para evitar que los pobladores se vean afectados por enfermedades respiratorias.
La última erupción violenta del volcán Popocatépetl se registró en el año 2000 y como consecuencia de aquel desastre se evacuaron a miles de personas.