Un equipo de investigadores ha desarrollado un tratamiento que ha mostrado resultados alentadores en casos de Parkinson avanzado. La terapia se llama Prosavin, y consiste en introducir tres genes de forma segura dentro del cerebro, con la finalidad de reprogramar ciertas células cerebrales para que produzcan dopamina, sustancia esencial para el control del movimiento.
Los resultados obtenidos son alentadores, pero los científicos plantean que todavía es necesario pasar por muchas pruebas para demostrar la efectividad del tratamiento. Los investigadores indican que los resultados observados están dentro del rango del «efecto placebo» similar al obtenido en otros ensayos clínicos.
Kyriacos Mitrophanous, jefe de investigación de Oxford BioMedica en Inglaterra, indicó a los medios «Hemos demostrado que podemos administrar los genes de forma segura dentro del cerebro de los pacientes y crear dopamina, el agente que falta en los pacientes de Parkinson».
Las primeras pruebas se han desarrollado en un grupo de 15 pacientes de Parkinson que ya no respondían a otro tipo de tratamiento. Tras las pruebas iniciales los pacientes mostraron mejoras significativas tras dejar de tomar otros medicamentos. Los investigadores indicaron que se lograron mejores resultados al utilizar dosis más altas de Prosavin. Con el uso de este nuevo método los pacientes tuvieron menor necesidad de utilizar levodopa.