Generalmente se cree que beber alcohol durante el embarazo afecta al feto, por esta razón las mujeres que han bebido alcohol durante las primeras semanas de gestación sin saber que estaban embarazadas podrían sentirse culpables. Pero recientemente, un estudio realizado entre 1.600 mujeres danesas reveló que solo el consumo de altas dosis de alcohol (nueve dosis, de 12 gramos cada una) durante el embarazo afecta el desarrollo de los niños.
Los investigadores publicaron los resultados de su trabajo en ‘BJOG: An International Journal of Obstetrics and Gynaecology’. Se hizo un seguimiento de cinco años en niños cuyas madres ingirieron alcohol durante el embarazo, se analizaron las medidas de inteligencia, atención, funciones ejecutivas y autocontrol de los niños hasta los cinco años. El universo del estudio fue dividido entre mujeres que consumían alcohol en dosis bajas (hasta cuatro bebidas a la semana), moderada (hasta ocho), alta (más de nueve) y los atracones de alcohol ( más de cinco bebidas en un día).

El estudio demuestra que no hay diferencia en el desarrollo de los hijos de madres abstemias y aquellas que consumieron cantidades bajas o moderadas de alcohol, tampoco en los casos en los que las mujeres habían tenido algún atracón. Solo los hijos de madres que consumieron grandes cantidades de alcohol presentaron problemas de atención.

Ulrik Schiøle, catedrático de Ginecología del Hospital Universitario Aarhus (Dinamarca) indica que hasta ahora las recomendaciones para las embarazadas apuntaban a evitar el consumo de alcohol, y resalta que ese consejo es el más adecuado. Los autores del estudio señalan que la investigación servirá para demostrar a aquellas mujeres que han bebido en forma moderada durante las primeras etapas del embarazo, que el alcohol ingerido no afectará el desarrollo de los niños.