Se requiere aplicar estrategias efectivas para recortar el consumo de bebidas azucaradas y proteger la salud de los niños.
En la búsqueda de estrategias para reducir el consumo de bebidas azucaradas entre las personas, un equipo de investigadores decidió analizar el comportamiento de compra de padres de familia, al exhibir etiquetas de advertencia, similares a las de los cigarrillos, en las botellas de refrescos indicando que el elevado consumo de bebidas azucaradas puede causar caries, incremento de peso y obesidad. Los resultados muestran que colocar etiquetas puede ser una estrategia efectiva, pero se requieren mayores esfuerzos para reducir el consumo de bebidas azucaradas entre la población.
La investigadora líder, Christina Roberto, organizó encuestas en línea para analizar las reacciones de 2,400 padres que tenían al menos un hijo de 6 a 11 años de edad. Se realizaron compras simuladas en línea, dividiendo a los participantes del estudio en seis grupos para observar el proceso de compras de bebidas. Un grupo no vio ninguna etiqueta, otro grupo vio las etiquetas de calorías y los participantes de los otros cuatro grupos vieron varias etiquetas en las que se advertía sobre los peligros que implica el consumo elevado de bebidas azucaradas, indicando que el consumo de esos productos puede producir aumento de peso, obesidad, caries y diabetes tipo 2.
Los resultados del estudio indican que el 60% de las personas que vieron las etiquetas de advertencia evitaron comprar bebidas azucaradas. El 60% de los que no vieron ninguna etiqueta, y el 53% de personas que vieron la etiqueta de calorías compraron bebidas azucaradas. Christina Roberto indicó que «Las etiquetas de advertencia parecen ayudar en una forma en que las etiquetas con las calorías no lo hacen».
Roberto explicó que las bebidas azucarados contienen hasta siete cucharaditas de azúcar por cada 192 mililitros, lo cual equivale casi el doble de la ingesta diaria de azúcar recomendada para niños. Se explicó que incluso las bebidas deportivas podrían tener niveles muy altos de azúcar.
El 40% continúa comprando bebidas azucaradas incluso a pesar de las advertencias. De acuerdo a los investigadores el efecto de las etiquetas tendría un efecto similar que en el caso del tabaco, pues las etiquetas sobre las bebidas azucaradas serían efectivas con algunos padres, pero no con todos. En este punto de la investigación se requiere analizar estrategias para lograr que los padres elijan opciones más saludables para sus hijos.
Los resultados del estudio sobre los efectos de las etiquetas en bebidas azucaradas pueden ser una base que pueden utilizar estudiantes de el área de salud y nutrición de FUNIBER, para proponer medidas en sus respectivos países para promover una alimentación más saludable en los niños.
Fuente: Medline
Foto Creative Commons: Andy Schultz