El éxito de los empresarios chinos en la actualidad es indiscutible. Paciencia, constancia y servicio son algunos de los rasgos más comunes atribuidos a los líderes asiáticos.
Según datos publicados y últimas informaciones compartidas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), China se erige como líder económico mundial por excelencia, rebasando ya a los Estados Unidos.
Ya lo manifestó el militar y estadista francés Napoleón Bonaparte al presagiar que “China es un gigante dormido; cuando despierte, temblará el mundo”.
A los empresarios asiáticos se les asignan unas costumbres específicas y atributos como el de poseer un gran autocontrol por la suavidad de temperamento. Asimismo, presentan una extrema determinación para la consecución de sus objetivos.
Tienen una mentalidad a largo plazo por lo que prefieren postergar cualquier tipo de gratificación para alcanzar sus metas.
Pero ¿cuáles son las pautas que siguen para alcanzar el éxito? Los empresarios chinos se caracterizan por seguir a raja tabla ciertas reglas:
- Mínima inversión inicial: al escoger un comercio o local, el precio es el factor más importante. Se decantan por la opción más barata y otros factores como la ubicación pasan a ser secundarios.
- Trabajar lo más temprano posible: La premisa es ganar cuanto más tiempo mejor para empezar a tener ingresos antes.
- Adaptación y resolución de eventos inesperados: presentan una gran capacidad de adaptabilidad y resiliencia ante posibles cambios de planes. Además, tienen un bajo grado de apego, por lo que en caso de que el negocio no marchase como se esperaba, lo cambian sin más.
- La competencia no existe: perciben a la competencia como un factor beneficioso dado que les ayuda a impulsar su excelencia.
- La ambición es el motor: Buscan constantemente incrementar sus beneficios o nuevas fuentes de ingresos.
- Capital humano: suelen escoger personal con el que compartan la misma cultura y mentalidad de eficiencia y sacrificio.
- Cumplimiento legal: para los empresarios chinos la base de todo negocio sostenible es la legalidad y la ética. Detestan el trato especial o favores por parte del gobierno por lo que cumplen con la Ley Tributaria.
- Servicio orientado al cliente: tratan al cliente siempre con eficacia y amabilidad. Incluso pueden llegar a extender los horarios (dentro de los límites que marca la ley) para que sus clientes puedan encontrarlos en todo momento.
- Financiación interna: evitan el endeudamiento y las entidades bancarias. Los chinos suelen apoyarse entre ellos para conseguir financiación.
- Apertura de nuevos negocios: permanecen atentos a nuevas posibilidades comerciales. con la intención de encontrar nuevas oportunidades de negocio.
A pesar de las diferencias entre la cultura oriental y la occidental, sería interesante aprender y aplicar las reglas de oro de los empresarios chinos.
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Fuente: 10 CLAVES DEL ÉXITO DE LOS EMPRESARIOS CHINOS
Las claves del éxito de los emprendedores chinos en España
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