Bailar mejora la salud y tiene múltiples beneficios para nuestro bienestar y forma física.
Aunque ha sido y sigue siendo tema de debate, hoy el baile es considerado por muchos un deporte, lleno de estilos y modalidades. Tal y como explica Júlia Ndocky, entrenadora personal y técnica del Club Metropolitan, “siendo puristas, si nos ceñimos a la definición, en general, bailar no sería un deporte en sí, puesto que carece de reglamento y competición. No obstante, existe el baile en modalidad deportiva, con campeonatos regulados por federaciones nacionales e internacionales. En ese marco normativo, sí se podría considerar un deporte”. Además, por primera vez en la historia de los Juegos Olímpicos, el Comité Internacional ha incluido la modalidad de break dance como disciplina deportiva para París 2024.
Beneficios de practicar baile
Por lo tanto, independientemente de su clasificación como deporte o no, bailar sigue siendo una actividad física muy completa para practicar tanto solos como en grupo. A continuación, te presentamos 8 beneficios que ofrece el baile:
- Quema calorías. Bailar favorece la quema de calorías ya que se trata de un ejercicio de cardio, cuya duración e intensidad pueden variar. En especial si la música nos marca el ritmo.
- Numerosas disciplinas de baile y fitness incluyen ejercicios tonificadores como sentadillas, curls, Lunges, push-up’s o movimientos con carga.
- Previene la pérdida de masa ósea. Muchos estilos de baile incorporan movimientos que requieren la activación de gran parte de los músculos del cuerpo. Esto refuerza los huesos sin dañar las articulaciones.
- Ayuda a mejorar la memoria y la coordinación. Aprender nuevos pasos y coreografías aumenta la agudeza mental y estimula la actividad cerebral, así como la coordinación.
- Una terapia de desahogo. Durante el baile, la mente se relaja y el cuerpo consigue desconectar de la rutina. Cuando bailamos estamos concentrados solo en pasarlo bien y se liberan grandes cantidades de estrés.
- Aumenta la energía. Tras una sesión de baile, los sentimientos positivos se multiplican. Se recupera la energía y el ánimo que necesitábamos antes de comenzar la sesión.
- Nos vuelve extrovertidos. Además de desarrollar la comunicación, bailar nos vuelve más abiertos y sociables y fomenta el compañerismo.
- Como apuntábamos en una de las entradas anteriores, no hay que olvidar el efecto terapéutico de la música. Está demostrado que escuchar música durante el ejercicio puede mejorar el rendimiento en un 15%.
En este sentido, FUNIBER ofrece estudios en el área de Salud y Deportes. Por ejemplo, con el programa de Maestría en Actividad Física y Salud.
Fuente: ¿Bailar es deporte?
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