07-full_scottish_breakfast(Boletín Funiber 08 – 2009) Desayunar es un hábito que ayuda a mantener un buen estado de salud, sin embargo los jóvenes suelen omitir esta comida con el paso del tiempo. Se ha determinado que las conductas alimentarias adoptadas en la infancia y adolescencia persisten en la edad adulta, por ello investigadores del Reino Unido realizaron un análisis de ensayos para determinar el nivel de influencia que tienen los comportamientos familiares sobre los hábitos de alimentación de los jóvenes.

Los especialista a cargo del análisis de datos seleccionaron ensayos sobre niños y adolescentes de entre 6 y 18 años, diferenciando las muestras en dos grupos etarios considerando una muestra de estudio a los menores de 12 años y la otra muestra compuesta por los adolescentes mayores de 12. Los trabajos seleccionados debían tener como mínimo 24 horas de duración y medir los posibles correlatos de comportamiento en las familias de los participantes.

Para este análisis se tomaron en cuenta 24 artículos, 6 sobre niños y 19 sobre adolescentes, considerando trabajos que provenían de Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, Gran Bretaña, Los Países Bajos, Finlandia, Francia, Suecia, Dinamarca, China y Taiwan. Entre los estudios recopilados no existió homogeneidad, por tanto los resultados se plasmaron en observaciones generales que podrían ser estudiadas con mayor detalle en estudios posteriores.

El estudio a cargo de la Dra Pearson de la escuela de deportes de la Universidad de Loughborough determinó que la presencia de los dos progenitores en el hogar ejercía influencia sobre el hábito de desayunar de los jóvenes, sobre todo resultaba relevante que alguno de los dos padres tuviera el hábito de desayunar, y esta práctica cotidiana influía en la actitud juvenil de no pasar por alto el desayuno.

Uno de los factores negativos que se descubrió a través del análisis de datos fue que el atravesar penurias económicas en la adolescencia constituye un factor disuasor de la costumbre de desayunar. Además el estudio encontró muchos otros factores como los aspectos materiales, socioculturales y demográficos que podrían tener cierto nivel de influencia, pero dada la novedad del estudio solo se consideran como punto de partida para estudios posteriores.

Contacto:

Dirigir correspondencia a: Dra. N. Pearson, School of Sport and Exercise Sciences, Loughborough University, Loughborough, Leicestershire LE11 3TU, UK.