Estudio en México apunta efectos positivos del impuesto sobre las bebidas azucaradas en el país, en el consumo de estas entre 2014 y 2015
En México, las personas ya consumen menos bebidas azucaradas. En el 2015, un año después de la implementación de un impuesto sobre estos productos, se ha percibido una disminución del 9,7% en la compra de estas bebidas. Ya entre las casas con un nivel socio económico más bajo, la cifra ha sido aún más baja (11,7%).
El estudio, publicado en la revista Health Affairs, ha sido realizado con investigadores del Instituto Nacional de Salud Pública de México y la Universidad de Carolina del Norte. Los investigadores han utilizado datos del Servicio de Panel de Consumidores de México de Nielsen, con información lograda de 6.645 lares mejicanos, de 53 ciudades, entre enero de 2012 y diciembre de 2015.
Los investigadores han analizado los datos contrastando el tamaño y la composición de las familias relacionando a factores como la educación, nivel socio económico, e incluyendo variables macro económicas como es la inflación. Han sido estimados los cambios de consumo y comparados los datos si no hubiera sido implementado el impuesto sobre las bebidas azucaradas.
En el mismo año de implementación de la ley, en el 2014, que ha sido sumado 1 peso mejicano por litro, hubo una disminución del 5,5%. Por otro lado, el consumo de otras bebidas sin el impuesto ha ascendido en un 2,1%.
Los resultados del estudio van en contra a una noticia publicada en The Wall Street Journal, publicada en mayo de 2016, que presentaba un aumento de las ventas de estas bebidas. Esto porque, según el estudio, no han sido analizados factores importantes como el crecimiento de la población y la época del año.
A pesar del estudio haber realizado un análisis en las zonas urbanas, la investigadora Dra. Arantxa Colchero, del Centro de Investigaciones del Sistemas de Salud del Instituto Nacional de Salud Pública de México, cree que los resultados en las zonas rurales serían muy similares. “Es muy probable que los individuos de las zonas rurales hayan contestado mejor”, ha comentado.
Medidas para el control
El impuesto, sin embargo, podría no haber sido el único incentivo para la disminución del consumo de bebidas azucaradas. Otros esfuerzos han sido hechos para reducir la obesidad infantil en México como han sido la restricción de estas bebidas y otros alimentos altamente calóricos en las escuelas y el control sobre la propaganda destinada a niños.
Con las medidas, otros factores como la conciencia de la población sobre los daños causados por el consumo de este tipo de producto podría haber influenciado en el acto de la compra.
Muchos estudios recientes ya han relacionado la diabetes y la obesidad con el consumo de bebidas azucaradas. En México, el 14,7% de la población adulta tiene diabetes. Dados de 2012 también han mostrado una superioridad del sobrepeso y de la obesidad en la población (71,3% entre adultos).
Una encuesta realizada en el país en 2016 ha mostrado que el 80% de los entrevistados han afirmado consumir regularmente bebidas de este tipo. De estos, el 39,1% consumían diariamente y el 33,2% varias veces por semana.
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Artículo original: In Mexico, Evidence Of Sustained Consumer Response Two Years After Implementing A Sugar-Sweetened Beverage Tax (Health Affairs)
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